La mesoterapia reductora para perdida de peso es una técnica estética en la que, mediante la infiltración de unas sustancias bajo la piel (una zona que se conoce con el nombre de mesodermis), se consigue eliminar grasa corporal que difícilmente desaparecería del cuerpo siguiendo una dieta.
La composición de las inyecciones que se usan en las infiltraciones que se realizan en una sesión de mesoterapia reductora varía dependiendo de la naturaleza de la grasa y de la cantidad que haya que eliminar. Lo habitual es que contenga minerales, vitaminas y aminoácidos. Es decir, sustancias no invasivas que eliminan los cúmulos de grasa que se esconden bajo la piel.
Se trata de una técnica localizada, es decir, que actúa en aquellas zonas concretas en las que queremos acabar con la grasa acumulada.
Esta técnica también se emplea para reducir el dolor agudo, por lo que es habitual que algunas de sus inyecciones contengan sustancias que reduzcan esta sensación. Muchas veces son productos naturales propios de la homeopatía. En la actualidad, la mesoterapia es una de las técnicas más populares de la medicina deportiva, estando especialmente indicada para el tratamiento de lesiones.
Mesoterapia reductora para pérdida de peso: Ventajas y aplicaciones
La mesoterapia reductora es una técnica estética que presenta múltiples ventajas. La principal es que los resultados son visibles desde la primera sesión de tratamiento. Una aplicación que suele durar una hora y a veces con tres o cuatro sesiones es suficiente para lograr el objetivo marcado.
Sus resultados duran varios meses, aunque esto depende de la composición de la infiltración y de la naturaleza de cada persona.
Las más conocidas son:
- Permite modelar el cuerpo siguiendo los deseos de la persona. Al actuar de manera directa sobre la zona que queremos reducir nos permite alcanzar la silueta que deseamos de manera rápida y directa.
- Ayuda a mantener en buen estado la piel, sin estrías.
- Mejora el drenaje linfático.
- Disminuye la celulitis.
- Mejora el flujo sanguíneo en la zona tratada.
En el ámbito de la estética está especialmente recomendada para eliminar la grasa de las siguientes zonas:
- Abdomen.
- Rostro. De hecho es muy popular como tratamiento contra el acné.
- Enfermedades de la piel como la soriasis, el vitíligo, las pecas, la flacidez y las estrías.
- Para frenar la caída del cabello.
- Revitalizar y desintoxicar órganos como los ovarios, las glándulas suprarrenales o la tiroides.
Mesoterapia reductora: Recomendaciones
Las personas que quieran someterse a una o varias sesiones de mesoterapia reductora para pérdida de peso deben seguir una dieta saludable para favorecer la eliminación de toxinas del cuerpo. También es recomendable que se mantenga una buena hidratación del organismo, pues así se consigue expulsar del organismo aquellos cúmulos de grasas sueltas que queden tras el tratamiento reductor.
Además, para mantener los resultados obtenidos tras varias sesiones de mesoterapia reductora para pérdida de peso es conveniente la práctica regular de ejercicio. Solo de esta manera prevenimos la aparición de nuevas acumulaciones de grasa en la zona afectada (o en otras) y mantenemos tersa la piel.
Dado que en la combinación de sustancias que se inyectan en el organismo hay productos químicos, es necesario que la persona se someta a un reconocimiento médico antes de someterse a una mesoterapia reductora. Y es que las personas que sufren problemas del corazón, las que tienen diabetes o están dando el pecho a sus hijos no deben someterse a este tipo de intervenciones.
Mesoterapia : ¿Una nueva técnica médica?
Aunque muchas personas piensan que la mesoterapia es una técnica nueva, no la realidad es bien distinta. Ya en los años treinta del siglo XX se practicaba este sistema de tratamiento a través de agujas de pequeño calado en muchos balnearios franceses. Su paso a la estética y a los tratamientos contra el dolor lo llevó a cabo el médico francés Michel Pistor, quien comenzó su aplicación generalizada a partir de 1952.
Desde los años ochenta del siglo pasado, la mesoterapia está considerada como una rama de la medicina tradicional y así se le reconoce en todo el mundo.
Es importante que, si queremos someternos a este tratamiento, acudamos a una clínica especializada, donde tengan el equipo y los profesionales necesarios para ejecutarla adecuadamente
